A veces, la forma en que se escribe es más importante que la longitud. Se puede escribir una sola frase y mostrar interés, o se pueden escribir tres párrafos y no decir nada. Todo depende de cuánto comprenda la persona a su cliente y de su capacidad para expresar sus ideas de forma sencilla y concisa.

Me inclino más por el término medio. Utilizo ultramsg para escribir a los clientes por su nombre, pero sin enrollarme demasiado. La automatización ayuda a no olvidarse de la personalización, incluso cuando hay cientos de mensajes. Lo importante es no convertir cada comunicación en una copia de una plantilla. La gente nota cuándo se les habla de verdad.